“Sobre verdad y mentira en sentido extramoral” es un conocido ensayo de Nietzsche. Su recuerdo surge cuando, cada vez más asiduamente, nos enfrentamos con sustitutos de los materiales naturales. Piedras que no son piedras, madera que no es madera, acero que no es acero. Sustitutos que incluso adquieren a veces la forma de los mismos materiales ya envejecidos. Estamos en el terreno del simulacro. La pregunta por la verdad y la mentira en sentido estético surge inevitable. Si bien intentar una respuesta es particularmente complejo, parece importante que resuene en la conciencia al menos la pregunta.