“Organismo en el aire” es el título de una canción de Spinetta, quizás uno de sus temas más bellos. Lo recordamos al afrontar el proyecto de un pequeño parador, cuya premisa consiste en hacer contacto con el suelo que lo sustenta en un grado mínimo. Una cuestión de sustentabilidad: preservar el preciado médano, fundamental para el ecosistema de la playa. Se trata entonces de pensar un “organismo”, y todo edificio lo es en sentido moderno, “en el aire”. Un aire que nos hace sentir, como dice la letra de la canción más adelante, una cierta ansiedad del abismo.
En el bosque y frente al campo de golf, se destaca el emplazamiento oblicuo de esta casa, subrayado por las líneas horizontales. Una materialidad natural y cálida, con especial atención en su inserción en el paisaje. Construida en steel frame, y atenta a la sustentabilidad, la casa se eleva liviana sobre el terreno.
Construidas con una estructura metálica montada sobre un basamento comercial en hormigón armado, se levantan las cuatro torres, que conforman un conjunto que tiene gran visibilidad en el paisaje. Una imagen tecnológica donde el hierro es protagonista y que dinamiza una urbanización con gran futuro.
Proyecto de condominios para + Colonia y Criba, que explota la extraordinaria situación del entorno frente al Río de la Plata, con acceso a las playas de arena, vegetación frondosa y una cantera de aguas cristalinas. Los edificios buscan mimetizarse y dialogar con el paisaje desde su materialidad.