Por primera vez, el Estudio afronta el desafío de proyectar un conjunto que, por su tamaño y la complejidad de usos, tiene una marcada presencia urbana. El Distrito comprende dos lotes contiguos, separados por una calle que se abrirá entre ambos, y se inserta dentro de una zona que comprende el recientemente inaugurado Paseo del Bajo y la remodelación de la Av. Castillo frente al Puerto de Buenos Aires.
Se trata de un proyecto que está llamado a dar inicio al desarrollo de un área de la Ciudad gran potencial hacia el futuro.
El proyecto partió de la remodelación del antiguo Hospital Ferroviario, edificio emblemático del racionalismo de Buenos Aires. En consecuencia se optó por la conservación de la estructura original, a la que se le adosaron algunos bloques que se integran formalmente a la estructura existente. Totalmente dedicado al uso residencial y de studios profesionales, ofrece muchas variantes, desde amplios lofts que aprovechan la característica espacialidad del Hospital, hasta unidades convencionales que se ubican en los nuevos volúmenes.
El edificio Plaza, el segundo que compone el Distrito, está destinado a oficinas, y se ubica sobre la Av. Antártida Argentina conformando un bloque triangular que copia la singular forma del lote. Con nueve pisos de altura, el volumen tiene fachadas vidriadas continuas y un patio interior donde se resuelven los accesos. Los amplios retiros del frente dan lugar a amplias veredas que priorizan la peatonalidad y dan lugar a un zócalo comercial cuyo uso unifica y vitaliza la propuesta. Un Distrito que es una parte de la ciudad, abierto y conectado al futuro.